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Ep. Nº1
2024-05-16
El arte de las buenas propuestas
Bernardo García Consultor de Stone Soup

En este primer episodio del podcast Academia de Impacto, Yolanda Palomo, embajadora de Efecto Colibrí en España, conversa con Bernardo García Izquierdo, miembro de la comunidad de consultores de StoneSoup  y mentor en la Academia de la Fundación EDP.

¿Qué esperar en este episodio? Yolanda y Bernardo exploran posibles respuestas a una de las preguntas más populares entre las ONGs: ¿cómo desarrollar propuestas que nos lleven a los fondos que nuestra organización necesita? Entre otras cosas, Bernardo comparte las trampas en las que solemos caer en el proceso así como recomendaciones para la formulación exitosa de propuestas.

Transcripción

Yolanda Palomo: Para comenzar, indagamos acerca del panorama actual del tercer sector, qué transformaciones vienen sucediendo y hacia dónde se inclina el futuro.

Bernardo García Izquierdo: Una de las tendencias de los últimos cinco años, es que así como antes, las empresas casi únicamente se dedicaban a aportar subvenciones o ayudas económicas al tercer sector. Ahora diría que las grandes empresas han creado sus propias fundaciones corporativas o sus propios departamentos de Responsabilidad Social Corporativa (RSC): están siendo ejecutantes de proyectos típicos del tercer sector y por lo tanto, entrando en clara competencia con el sector de las asociaciones y fundaciones.

Creo que por un lado los financiadores (sobre todo los privados) demandan de las organizaciones del tercer sector que demuestren cuál va a ser el impacto que van a desarrollar en sus intervenciones. El tercer sector hasta ahora se había centrado en responder a los requisitos de las diferentes convocatorias, sean públicas o privadas. Yo creo que es un cambio importante y que ojalá en un futuro genere una mayor contribución de los recursos y la energía que se mueve en el tercer sector.

Yolanda Palomo: También vemos que el impacto va cobrando más y más protagonismo a la hora de encontrar financiación. Ya no importa tanto cómo de creativas sean las iniciativas sino qué transformaciones positivas generan en las personas y en el planeta. ¿Qué otros cambios se vienen consolidando?

Bernardo García Izquierdo: Se ha acelerado también la profesionalización del tercer sector. Poquito a poco las entidades van adquiriendo cada vez más herramientas de gestión al nivel que necesitan. También se ha acentuado la digitalización, del uso de uno de apoyos tecnológicos para ganar en eficiencia, en capacidad de comunicación para introducir una mejoría en las condiciones de vida, en la calidad y el bienestar de las personas con las cuales el tercer sector colabora.

Yolanda Palomo: En España existen más de 29.000 ONGs en las que colaboran alrededor de 2 millones de personas. Seguramente, muchas de ellas hayan atravesado procesos de búsqueda de fondos y sepan que no siempre es una tarea sencilla. No hay reglas que garanticen el éxito; vamos aprendiendo de los intentos, de los aciertos y, por supuesto, de los fallos. ¿Cuáles son los errores más comunes y algunas recomendaciones para evitarlos?

Bernardo García Izquierdo: Yo creo que es importantísimo que en el proceso, si hay posibilidad de interlocutar con quienes están a cargo de esa convocatoria. Es muy importante aclarar cosas: saber interpretar bien lo que está detrás de los formularios y de los pliegos de condiciones.

Otro de los grandes fallos que a veces se cometen las organizaciones no gubernamentales es que apuran hasta el último minuto para elaborar la propuesta y presentarla antes de que se cierre la convocatoria. Y ese correr correr no es recomendable. Se necesita calma y sosiego para elaborar tu borrador, tu relato.

Si lo que venimos haciendo encaja en las convocatorias, no debería suponer una gran dedicación. Solamente hacer las adaptaciones necesarias para que lo que hacemos se pueda explicar razonablemente bien. Es clave saber planificar a medio largo plazo.

Yolanda Palomo: Nos queda claro que tenemos que tomarnos el proceso de postulación con la mayor calma posible. Pero, ¿cómo saber si realmente encajamos?

Bernardo Izquierdo: Se ha demostrado que si fuerzas mucho y construyes propuestas que no son exactamente lo que haces, sino que haces una especie de Frankenstein juntando piezas de cosas que haces para que te encajen, no es positivo para nadie, aunque consigas que consigas los fondos. Por lo tanto, yo creo que los pasos a seguir son:

  1. Plantearte si lo que lo que plantea la propuesta encaja con lo que tú haces y con tu propósito y tu manera de funcionar.
  2. Si vemos que sí, lo siguiente es tratar de identificar cuanto antes cuál va a ser ese propósito final de la propuesta. ¿qué queremos realmente alcanzar? Y que esto sea atractivo. Detrás de la evaluación de cualquier convocatoria, sea pública o privada, hay personas.
  3. Entender la filosofía de la entidad convocante más allá de los condicionantes que nos piden y tratar de buscar un lenguaje común para que luego nos interpreten adecuadamente y favorablemente.

Yolanda Palomo: En la práctica, puede haber una línea muy delgada entre buscar un lenguaje común y adaptar el lenguaje de manera excesiva para que nuestra postulación resulte ganadora. ¿Cuáles son los aspectos a tener en cuenta para conseguir fondos y mantenernos auténticas al mismo tiempo?

Bernardo García Izquierdo: Si nos dedicamos a algo y lo hacemos de determinada manera y con un determinado propósito, tenemos que serle fiel a eso. Si nos empezamos a hacer trampas al solitario y empezamos a decir que también podemos hacer esto otro, o podemos conseguir los mismos objetivos, pero de otra forma a la que lo hemos hecho tradicionalmente, corremos el riesgo de perder nuestra esencia.

Perder nuestra identidad por querer acceder a determinados recursos tiene consecuencias muy negativas.

 Los responsables de hacer el seguimiento y la evaluación de la ejecución del proyecto, detectarán que efectivamente no éramos lo que parecíamos ser. El peor escenario es que nos involucremos en actividades para determinados grupos de interés en las que no seamos suficientemente competentes ni lo hagamos de la manera en la que creemos que deberíamos hacerlo. Esto resultará en que nuestro impacto final no sea el deseable. Y a la larga eso también puede hacernos perder credibilidad incluso para futuras convocatorias.

Aunque a veces cueste, porque uno de los retos del tercer sector es la escasez de recursos, a veces es mejor decir no.

Yolanda Palomo: ¿Qué pasaría si, una vez conseguido el fondo, nos dicen que nos convendría devolver el dinero? Inicialmente suena absurdo, pero ¿en qué situaciones ésta sería la mejor decisión?

Bernardo García Izquierdo: Por ejemplo, si tenemos información de que la entidad financiadora o la persona financiadora está manifestándose en su actuación de manera contraria a nuestros valores, a nuestros principios, a nuestros intereses. Eso sería nefasto para nuestra reputación, para nuestra credibilidad e incluso para nuestros propios fines. Entonces, esa es una situación claramente a evitar.

Otra posibilidad que también se ha dado históricamente es que recibamos una financiación y nos encontremos con que no tenemos capacidad operativa de llevar a buen puerto ese proyecto. Recibir demasiados fondos de golpe, no te permite ejecutarlos de manera ordenada.

Otro motivo para para renunciar a cierta financiación es cuando la entidad financiadora no es lo suficientemente rigurosa en procedimientos necesarios para la ejecución exitosa de la financiación p.ej. administración, seguimientos o evaluaciones. Yo quizás aquí no renunciaría, pero sí me plantearía muy seriamente el optar en el futuro.

Yolanda Palomo: ¿Crees que las ONGs siempre tienen que buscar fondos?

Bernardo García Izquierdo: Creo que esa necesidad imperiosa de conseguir recursos económicos hace que las ONGs están convirtiendo esta actividad en casi lo primordial. El hecho de que la formulación de propuestas sea al final lo que gobierna a la entidad es muy arriesgado.

Todas las entidades que puedan diversificar sus fuentes de financiación van a encontrar una situación más cómoda para poder evitar este sesgo de que las formulaciones de proyectos nos guíen en todo lo que hagamos.

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